Conocí Método INTEGRA en el año2017 (hace unos 7 años), veía videos, y practicaba con algunos de los ejercicios que Ricardo nos comparte gratuitamente por Youtube. Tengo dos hijas una chica de 23 años libre y autosuficiente, y otra hija con autismo y parálisis cerebral. En ese momento yo estaba muy enfocada en su desarrollo, para ayudarla a que fuera lo más funcional posible, pensé que quizás usando Método INTEGRA podría ayudar a mi hija (en ese momento la formación para ser facilitador de Método INTEGRA no estaba a mi alcance económicamente hablando, e incluso pensé que jamás lo podría tomar).
Pasaron los años y en 2020, en la pandemia, ocurrieron sucesos en mi vida que me movieron lo que yo sentía que era mi estabilidad y mi seguridad.
Mi hija Ivanna en octubre del 2020 ya hablaba, lo que me llevo años lograr y, de la noche a la mañana dejo de hablar, como si le hubieran apagado el interruptor del lenguaje, así tal cual.
Eso para mí fue devastador.
Y el segundo suceso fue que, en el mes de febrero del 2021, me detectaron un quiste de ovario con altas posibilidades de ser cáncer por el tamaño y el cuadro clínico.
Mi mundo se desmoronó, caí en una sensación de agujero negro, y yo sentía que no había nadie a quien decirle ayúdame, tenía que salir de esa sensación de miedo y angustia que me estaban dominando en mi vida, tenía 2 hijas por las cuales luchar, y una en especial con autismo.
En mi desesperación me llego la claridad, apareció un video de Ricardo Eiriz, y pensé aquí está, Método INTEGRA me puede ayudar.
Empecé a trabajarme tan solo con lo poquito que había aprendido en los videos, a quitar traumas y bloqueos emocionales, y fue más que suficiente para darme cuenta de que si en verdad quería cambiar mi realidad, tendría que ser una profesional de Método INTEGRA.
En un en vivo de Ricardo escuché un comentario del público, que alguien tenía problemas de salud, problemas económicos y problemas de amor, y Ricardo le dijo: te urge Método INTEGRA.
Yo pensé, a mí también me urge.
No tenía trabajo, estaba enferma, estaba deprimida, mi relación con mi hija mayor era pésima, mi hija Ivanna con autismo, sin hablar, perdiendo capacidades en lugar de mejorar, uff, mi mente me llevaba hacia donde yo no quería ir.
Entonces me programé con las 2 herramientas de quitar traumas y bloqueos emocionales para tener el dinero para pagarme el curso de Facilitador de Método INTEGRA.
No sé cómo pasó, pero lo logré, junté el dinero para pagar las 3 certificaciones, inicié la certificación en febrero de 2022 para facilitador nivel 1.
Ya era enero 2023, y yo estaba terminado el curso de facilitador nivel 3 cuando en una fiesta de cumpleaños me llevé mi iPad, y estaba sentada pasando mis apuntes del curso de la libreta al iPad, cuando una persona me pregunto: ¿qué estás haciendo?
Al voltear vi la cara de una mujer muy bonita y tierna, le expliqué yo soy facilitadora de Método INTEGRA, y ahí comenzó la plática de lo que hacía con las sesiones de método INTEGRA.
Me contó que su hija Regina tenía problemas para dormir, debido a que veía sombras o espíritus que le molestaban, no podía dormir, despertaba a medianoche llena de miedo y llamaba su mamá debido a la angustia que tenía, y Rox (así se llamaba la mujer) me comentó que no sabía qué hacer, que habían intentado algunas terapias, pero nada funcionaba
Yo le contesté, para mí eso es fácil de trabajar con Método INTEGRA, Rox me miro con ojos de sorpresa, preguntándome si era cierto, y mi respuesta fue que sí, con Método INTEGRA eso se soluciona rápido y sin dolor.
Quedamos de acuerdo en trabajar con Regina.
Todo fue rápido, dejó de ver los espíritus y empezó a dormir todas las noches. Empezó a sacar mejores calificaciones en la escuela, y a tener amigos.
Fue mi primer protocolo realizado a personas diferentes a mí y a mis hijas, y con un tema que en ese momento para mí era muy nuevo, pero mi seguridad era tal, que supe que funcionaría.
En cuanto a mi diagnóstico de probable cáncer de ovario, les puedo contar que me quité un trauma y un bloqueo emocional antes de la cirugía, ya que yo aun no era facilitadora.
Cuando salí de la cirugía, el ginecólogo me dijo que eso parecía cáncer y que solo faltaba esperar el reporte histopatológico.
Cuando fui por los resultados, la muestra tenía todos los cambios histopatológicos de cáncer, excepto la desorganización celular. Yo no puedo decir que fue por el bloqueo emocional que me quite, pero si les puedo asegurar que desde que tengo la fortuna de usar Método INTEGRA, en mi vida han ocurrido cambios mágicos, que yo sé que más que mágicos es que estoy alineando mi subconsciente hacia la vida que quiero alcanzar.
Ricardo Eiriz y Método INTEGRA están cambiando la vida de muchísimas personas en el mundo, incluyendo la mía, la de mis hijas y la de personas que han confiado en mí, y que he tenido la fortuna de ayudarles en transformar sus vidas para crear la realidad que sí quieren.
GRACIAS, GRACIAS GRACIAS!!!!
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Aquí el testimonio de Roxana…
“Hola, mi nombre es Roxana y vivo en Puebla. En el 2020, mi hija de 4 años en ese entonces comenzó a tener muchos problemas para dormir, se le adormecía una pierna y se levantaba dormida y hablando palabras sin sentido.
Todo esto repercutió en la escuela, le costaba mucho concentrarse y no tenía un buen desempeño. Se volvió muy tímida e insegura y le daba mucha pena hablar con personas que apenas conoce y hasta le dan ganas de llorar de los nervios.
Yo ya estaba muy cansada porque ni ella ni yo descansábamos, pero en enero 2023 conocí a Claudia en una reunión y platicamos sobre lo que ella realizaba y me interesó muchísimo. A partir de ese momento comenzó a trabajar con mi hija y ella empezó a dormir mejor, a no despertarse, dejo de hablar dormida y lo mejor es que se le quitó el dolor de su pierna por las noches.
En cuanto a la escuela, rápidamente vi cambios en ella, ya no se distraía en clases y empezó a sobresalir en sus materias.
Estoy muy agradecida con Claudia, muchas gracias por todo tu apoyo siempre con mi hija y con todas las dudas que yo como madre tenía. Bendiciones y agradecimientos para el Método INTEGRA.”
Roxana Ramírez García